En las últimas horas un grupo de vecinos de Pergamino, pusieron el grito en el cielo por el comportamiento de los “cuidacoches” en la zona céntrica entre calle 9 de julio y Av. de Mayo, sobre todo en horarios nocturnos y de gran concurrencia al Bingo de nuestra ciudad.
A pesar de que la actividad de los cuicacoches estaría prohibida por ley desde diciembre del 2018, los vecinos siguen siendo víctimas de la denominada “mafia de los trapitos” y son muchos los que sufren las consecuencias al no dejarse extorsionar.
Según la palabra de éstas víctimas, no pagar la tarifa que ellos pretenden por estacionar en un lugar público puede terminar con el auto rayado, abollado, el vidrio roto o incluso algún faltante. Esto último es lo que le pasó a los empleados de una importante empresa de la ciudad que se acercó por un trabajo a la sala de juegos, encontrando su camioneta en este caso con una rotura y abolladura en los plásticos.
Lo más preocupante es que ahora, según comentan, toman represalias contra los conductores que se niegan a pagar el dinero exigido por el estacionamiento y la escalada de violencia es cada vez mayor.
Si bien los damnificados realizaron la denuncia al 147: Expresaron “nos dijeron que ellos no pueden responder ante esta situación porque no le corresponde y que se debe realizar la denuncia en la fiscalía”.
Si bien antes exigían una propina cuando el conductor volvía por su vehículo, ahora exigen una tarifa establecida por ellos mismos y que el pago sea por adelantado. No importa si es por 30 minutos o 5 horas, a todos les cobran lo mismo y sin ellos los que imponen las reglas.
