Una mañana realmente de terror le tocó pasar a la familia de Rocio, una profesora de danza de nuestra ciudad, luego que delincuentes ingresaran a su casa en el Barrio José Hernández, cuando tenía a más de 10 alumnas a su cargo en una pijamada, caminando entre ellas sin ningún tipo de problema.
La noche había transcurrido con normalidad, siendo un evento lindo para compartir con las nenas a las que les brinda clases de danza, pero todo se arruinó cuando en medio de la madrugada delincuentes sigilosos caminaron entre las menores y la familia dueña de casa.
El hecho delictivo fue descubierto recién a la mañana siguiente, cuando una de las menores alertó a su profesora del faltante de su teléfono celular. Inmediatamente se habrían sumado otras con el mismo relato, cayendo en la realidad de que alguien había visitado la casa durante la madrugada. Además Roció descubrió que se habían llevado la motocicleta de la familia del garaje, varias garrafas y otros artículos de valor, entrando en un estado de desesperación total.
Inmediatamente se habría comunicado con los papás de las nenas que serian oriundas en su mayoría del barrio Hernández y Virgen de Guadalupe, relatando lo ocurrido y pidiéndole que se presenten a buscar a sus hijas. Lamentablemente una vecina de la cuadra habría visto los movimientos durante la madrugada, enviándole un mensaje a Rocio para no salir de su finca, mensaje que nunca llegó por el robo de su celular hacía solo segundos en manos de éstos sujetos.
Más allá del mal momento que pasó Rocio por el terror de tener a tantas nenas a su cargo en un momento así, la familia ahora duerme intranquila lamentablemente sabiendo que malvivientes la visitaron durante la madrugada y caminaron entre ellos sin ningún tipo de problemas.
