Desde Alfa Noticias tuvimos una entrevista en exclusiva con la representante del hogar de ancianos conocido como San Vicente de Paul, en nuestra ciudad. Con un total de veinte abuelos que consideran una verdadera familia, el hogar busca ofrecer un ambiente donde vivan de manera digna y plena.
“Aquí viven veinte abuelos, son como una familia. El hogar que es como una hojita de un gran árbol. Existen distintas instituciones, aproximadamente en cincuenta y cuatro países. Acá en Argentina, tenemos el Concejo Superior, ubicado en Buenos Aires”. En resumen, en Pergamino, las Damas Rosadas, la Guardería San Pantaleón y el Hogar San Vicente son las tres organizaciones que trabajan incansablemente para brindar atención y cuidado a los ancianos de la comunidad.
En cuanto al funcionamiento del hogar, se destacó “Para anotar un abuelo, tiene que acercarse con algun familiar a la secretaría, por la mañana. El único requisito, es ser autoválidos. Por supuesto, como el geriátrico es de alta complejidad, hay abuelos que están en silla de ruedas o en enfermería, ya que estando viviendo aquí, se han enfermado”.
Se resaltó la importancia de la labor ad honorem de profesionales como psicopedagogos y la necesidad de talleres y actividades que enriquezcan la vida diaria de los residentes. “En su rutina, cada abuelo está a veces escuchando su radio, algunos juegan a las cartas. Por eso, necesitamos realmente implementar más talleres, eso los anima muchísimo, y también voluntarios que vengan para estar con los abuelos. Debido a la situación económica, no podemos contratar terapeutas, para hacer trabajos de distintos tipos”.
El hogar, ubicado en calle Francia y Florida, cuenta con amplias instalaciones que ocupan toda una manzana, brindando un entorno agradable. En medio de celebraciones por cumpleaños y el compromiso de seguir trabajando por el bienestar de los abuelos, la institución vicentina en Pergamino se muestra como un ejemplo de dedicación y cariño hacia nuestros mayores. Además, expresaron su agradecimiento a diferentes entidades que colaboran con el hogar.
“El conservatorio municipal de música, están viendo con Javier, el director, para hacer talleres de ritmo. El Instituto Superior de Formación Docente, con los estudiantes de psicopedagogía del último curso, nos prometieron que si pueden van a organizar talleres. A los abuelos le viene fantástico porque sino es dormir durante todo el día. Tienen que hacer actividades intelectuales para ir complementando su día a día”.
Cómo medio de comunicación es un orgullo saber que existe una institución tan dedicada al cuidado de los ancianos, y se espera que en los próximos días sea cada vez más gente la que se sume aunque sea a visitarlos y charlar con ellos algunos minutos.