Tras el devastador temporal que golpeó la ciudad y causó pérdidas millonarias, Bahía Blanca y sus alrededores enfrentan ahora un significativo vertido de petróleo que amenaza la ría y el ecosistema local. El intendente Federico Susbielles confirmó el incidente, que tuvo lugar el 26 de diciembre, cuando se registró un derrame de petróleo en el estuario procedente de la monoboya operada por Oiltanking Ebytem SA en Puerto Rosales.
La empresa ha anunciado la implementación de un plan de remediación y limpieza en el área identificada como el canal del embudo y sus alrededores, señalando dos nuevas zonas afectadas. Oiltanking Ebytem informó que contratistas especializados, supervisados por autoridades ambientales locales y provinciales, están llevando a cabo la labor de limpieza, con el objetivo inicial de reducir el volumen de hidrocarburos mediante equipos manuales y embarcaciones.
La compañía afirmó que todo material contaminado será embolsado, transportado por vehículos autorizados y enviado a la Terminal para su disposición final de acuerdo con los procedimientos ambientales vigentes.