Los directivos del Sindicato de Trabajadores Municipales de Berisso tildaron de “inaceptable e incomprensible” la decisión del jefe comunal de avanzar en una decisión que, según subrayaron, afecta la economía de muchas familias de Berisso y se ampara en un modelo de “premios y castigos”, con el objetivo de sancionar a quienes participaron de una medida de fuerza.
Una comitiva de directivos y afiliados del Sindicato de Trabajadores Municipales de Berisso (STMB) visitó esta mañana el Concejo Deliberante local, para dejar en manos de los concejales una nota mediante la que quedó expuesta su posición respecto de los descuentos efectuados por el gobierno comunal en los salarios de quienes participaron de una reciente medida de fuerza.
Tras presentar la cronología del conflicto, dirigentes del gremio efectuaron un fuerte cuestionamiento a la medida adoptada por el intendente peronista Fabián Cagliardi. Los planteos fueron oídos por los ediles Vanesa Queyffer, Agustín Celi, Silvina Di Renta, Sergio Rolón, Matías Nanni, Mariana Astorga y Claudio Topich.
En la nota elevada al Deliberativo, los directivos del STMB tildaron de “inaceptable e incomprensible” la decisión del jefe comunal de avanzar en una decisión que, según subrayaron, afecta la economía de muchas familias de Berisso y se ampara en un modelo de “premios y castigos”, con el objetivo de sancionar a quienes participaron de una medida de fuerza que finalmente devino en la solución de la situación por la que fue convocada.
En tal sentido, según publicó el portal local ElMundo, desde el gremio hicieron ver que nunca se privaría a los trabajadores que no participaron de una medida de fuerza de los beneficios alcanzados a través de ella.
A la vez, marcaron que “independientemente de la vigencia o nulidad de alguna audiencia ministerial”, los trabajadores cumplieron con el compromiso asumido, mientras que el intendente “decidió no respetar el acuerdo”, procediendo a efectuar los descuentos “por decisión propia y voluntaria”.
La paradoja, evaluaron, sería que recursos que la Municipalidad retuvo de los descuentos se utilice “para comprar indumentaria aún pendiente de entrega o insumos faltantes”.
“El hilo se corta por lo más delgado”, argumentaron, poniendo de relieve que mientras los trabajadores son sancionados por reclamar por sus derechos, la impericia, la negligencia, la indiferencia y los incumplimientos a acuerdos establecidos en los que incurrieran funcionarias y/o funcionarios políticos, nunca deriva en la afectación de “sus abultados sueldos o dietas mensuales”.
Finalmente, se pidió al Concejo que así como reconoció recientemente a trabajadores de otro rubro, “reconozca, defienda y valore” la actividad de los municipales. “Para algunos somos trabajadores de segunda”, se quejaron.