Axel Kicillof, gobernador de la provincia de Buenos Aires, volvió a brindar declaraciones en torno a la polémica de Martín Insaurralde, su ex jefe de Gabinete provincial, y las causas abiertas en consecuencia.
Al igual que la mayoría de los funcionarios oficialistas, Axel le “soltó la mano” y reforzó la campaña bonaerense para las elecciones del 22 de octubre, con el temor de las repercusiones negativas.
“Insaurralde nunca avisó que se iba a ningún lado. El Gobernador no lo sabía. Incluso respondía los mensajes por Whatsapp como si estuviese trabajando en La Plata», aseguró un allegado directo de Kicillof.