El auge del teletrabajo, que surgió como respuesta a la pandemia de COVID-19, ha generado un cambio significativo en la forma en que trabajamos, prometiendo una revolución en la modalidad laboral. Sin embargo, en Argentina, la realidad muestra un panorama diverso, donde el modelo híbrido gana terreno, pero la presencialidad sigue siendo relevante en el ámbito corporativo.
De acuerdo con un reciente relevamiento de Korn Ferry en 118 empresas, el 62% de las compañías argentinas encuestadas permiten a sus empleados trabajar de forma remota al menos parte del tiempo. «Este dato indica una tendencia hacia la flexibilidad laboral, aunque con cautela», señala Alejandra Tomas, Consultora de Delivery Total Rewards Digital Services para Argentina en Korn Ferry.
Por otro lado, un 20% de las empresas han adoptado completamente el trabajo virtual, lo que representa un aumento respecto al año anterior, sugiriendo que el trabajo remoto se está consolidando como una tendencia a largo plazo.
El estudio también revela que el esquema predominante limita el home office a dos días por semana, siendo esta la opción preferida por el 53% de las empresas. Marcela Angeli, Directora de Gestión de Talentos y Compensaciones de WTW, destaca la evolución del trabajo híbrido: «Ya no es una política inflexible, sino que se adapta a las necesidades de cada equipo, ofreciendo flexibilidad en la elección de los días de trabajo presencial».
Comparando con informes anteriores, se observa un desplazamiento hacia modelos menos presenciales, aunque la discrecionalidad en la asistencia ha disminuido, especialmente en grandes empresas, mostrando una búsqueda de equilibrio entre flexibilidad y cohesión laboral.