Desde la Secretaría de Ambiente de la provincia de Entre Ríos creen que las cortinas de humo azotando a San Nicolás de los Arroyos, producto de los incendios en las islas vecinas, podrían volver este verano. Si bien no se sintió en la ciudad, ya hubo focos de incendios en las islas Lechiguanas que están frente al distrito, bajo jurisdicción entrerriana. También hubo en cercanías de Villa Constitución.

“Tenemos estudios hechos sobre la recurrencia de incendios en la zona de islas. Gran parte del área central y sur del Delta, la región que va desde el límite Diamante-Coronda hacia abajo, tiene un porcentaje importante de vegetación de tipo herbácea”, explica Pablo Aceñolaza, director general de Ordenamiento Territorial de Áreas Protegidas y Biodiversidad de la Secretaría de Ambiente de la provincia de Entre Ríos, que además forma parte del área de Manejo de Fuego.

“Esta situación de los incendios ocurre constantemente, es algo que forma parte de los ciclos. Se han venido incrementando desde hace un tiempo y sobre todo por alguna cuestión que tiene que ver con el uso que se le está dando cada vez más a la zona de islas. La misma gente, que hace más uso del río y de las islas, además de los productores ganaderos que están dentro de ellas”, explicó. “Las condiciones ambientales, la bajante del río, la abundancia de vegetación seca hacen que estén dadas las condiciones para que mediante un fósforo se desmadre todo en cuestión de segundos”, graficó Aceñolaza.

Tanto en 2021 como en 2022, la mayor cantidad de los incendios se desató por personas que prendían fuego de manera intencional. Pero también hubo casos de personas que accidentalmente terminaron desatando un incendio. “En el caso de quienes sacan réditos económicos, es por el uso de fuego como manera de reducción de biomasa por parte de un modelo de producción de pasto para la ganadería. Y quienes lo hacen sin premeditar sus acciones, son vecinos que van a pasar un fin de semana y no apagan bien esos fuegos”.

Así, San Nicolás podría verse inmersa bajo un enorme manto de humo este verano. Los factores son múltiples. “Sabemos que estamos entrando en un período de Niña, aunque no muy marcada, pero va a haber baja humedad, alta temperatura y va a estar el río bajo. Estas son las condiciones necesarias para que tengamos incendios difíciles de controlar y que generen esas cortinas de humo que vieron ciudades como Victoria, Rosario y San Nicolás”.

“El problema va a estar en los incendios que se generen veinte kilómetros para adentro de la orilla, porque es imposible llegar a pie. Se necesita sí o sí un helicóptero, generando un gasto enorme para el Estado provincial, porque la hora de vuelo sale 4.000 dólares y se necesita mucho más de una hora para poder extinguir el incendio”, describió Aceñolaza. Y concluyó: “El humo va para el lado que lo lleve el viento. Si se tiene viento norte este verano, lamentablemente irá para el lado de provincia de Buenos Aires”.

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